Terapia cognitivo conductual
Entre las terapias más eficaces dentro de la intervención en psicología clínica, la Terapia cognitivo-conductual es una de las más reconocidas en la actualidad por sus buenos resultados a la hora de modificar pensamientos y emociones, junto con las reacciones que generan.
La Terapia Cognitivo Conductual funciona transformando los pensamientos desadaptados y sus respuestas, en las que se dan las conductas inútiles o negativas, a una psicología más positiva para el cliente.
El psicólogo que trabaja con esta terapia hace frente a los dos aspectos básicos del trastorno cognitivo conductual: la fobia social, el sufrimiento por una mala visión exterior; y la angustia y ansiedad que genera una mala gestión de las emociones (en base a las propias ideas y la conciencia subjetiva).
Bases de la Terapia cognitivo-conductual
El bienestar de la persona que sufre un trastorno es fundamental en la base de cualquier psicoterapia y, por eso, en la Terapia Cognitiva, se tienen en cuenta los procesos mentales de los pacientes, considerando que el problema no puede ser observado, o valorado únicamente a través de la conducta.
El trabajo de las habilidades sociales en la Terapia cognitivo-conductual
La psicoterapia Cognitivo Conductual parte de la base de que las reacciones emocionales, y el comportamiento, no solo se generan como respuesta a los estímulos externos. Dependen, igualmente, de la forma de percibir y procesar la información, según los esquemas mentales propios de cada persona.
A la vez que se sigue una metodología científica, apoyada por una parte por terapia conductista, que permite cuantificar las mejoras a lo largo del tratamiento, se parte también del aprendizaje práctico y la asociación.
El psicoanálisis para modificar la conducta cognitiva
La Terapia Cognitivo Conductual trabaja con un sistema estructurado en categorías, de tal manera que las ideas disfuncionales que se repiten de forma continua una y otra vez, se encuentran dentro de un esquema mental que origina las interpretaciones mentales personales de la realidad.
Después de identificar los pensamientos desadaptativos que producen el sufrimiento en la persona, se busca el reconocimiento y localización de situaciones experienciales reales. Estas pueden ser contrarias a sus creencias, para de ese modo identificar esos pensamientos, o interpretaciones erróneas.
Psicología Cognitiva Conductual: evitando el pensamiento obsesivo
La Terapia Cognitivo Conductual resulta muy efectiva por ejemplo el caso de pacientes que padecen anorexia a consecuencia de una visión distorsionada de su propia imagen, lo que les obliga a estar continuamente pendientes de su aspecto corporal, castigando su organismo con mucho desgaste energético, y sin una adecuada alimentación por encima de cualquier otra cosa en su vida.
En este caso, a través de la Terapia Cognitivo Conductual, se ayudará a estas personas para que consigan identificar sus esquemas cognitivos disfuncionales, que pueden estar actuando sobre esas estrictas y dañinas ideas obsesivas y en los que, sin duda, existen pensamientos contradictorios y dañinos.
Dichos esquemas mentales vienen generados por modelos culturales, entorno social, familiar, y otras ideas generadas desde la percepción de la información que el paciente recibe y transforma en su mente, de forma asociada a otros componentes de su personalidad.
Tras la identificación de esas ideas, el propio paciente irá fijando las metas a conseguir, y se irá cuantificando en cada consulta el grado de cumplimiento a través de una reestructuración cognitiva.
¿En qué casos se utiliza este tipo de psicoterapia?
La terapia cognitivo conductual es muy empleada en tratamientos que exigen ayuda psicológica inscrita en un ambiente simpático con las emociones (terapia Gestalt).
Son muchos los casos en los que el tratamiento exclusivo con Terapia Cognitivo Conductual consigue mejores resultados que el uso de medicamentos en determinados trastornos, porque frecuentemente el problema se encuentra en una distorsionada manera de pensar que afecta al estado emocional del paciente, repercutiendo en su comportamiento.
Terapia para la ansiedad
La Terapia Cognitivo Conductual puede darte las herramientas para saber cómo superar la ansiedad y todos sus síntomas. Es muy útil para superar todos los niveles a los que afecta: las fobias, la baja autoestima…
Tratar la depresión y sus síntomas
Por otro lado, también resulta muy útil frente a las adicciones, el trastorno bipolar y todos las secuelas que genera la depresión. Servirá como apoyo a fármacos e, incluso, puede llegar a sustituirlos (como ya hemos visto).
¿Qué se hace en un tratamiento de Terapia Cognitivo Conductual?
Primero se realiza el entrenamiento conductual
A través del entrenamiento, el psicoterapeuta enseña a la persona que sufre un trastorno, a abordar su propia forma de pensar, identificando los pensamientos que le generan el problema, y le conducen a interpretaciones inútiles y desadaptativas.
Por medio de un trabajo basado en el diálogo, el psicoterapeuta irá respondiendo a la información trasmitida por su paciente, plateando preguntas y enfatizando sobre la información recibida.
Se busca que sea la persona, por sí misma, quien identifique sus propias contradicciones, y llegue a sus propias conclusiones sobre los esquemas mentales que le aportan pensamientos indeseables.
Se establecen los objetivos cognitivos conductuales
Una vez que la persona reflexiona sobre las contradicciones entre sus procesos mentales y conductuales, se aborda la segunda parte de la intervención en la que se fijan los objetivos deseados cuyo grado de consecución se puede verificar de forma imparcial.
En este sentido la persona elige las estrategias que a su juicio le resultarán más asequibles para conseguir las metas fijadas, que en cualquier caso siempre pueden ser modificadas si no se obtienen los resultados esperados, variando los aspectos de la intervención terapéutica que resulten necesarios.
Ventajas de la Terapia Cognitiva Conductual con respecto a otros tratamientos
Los tratamientos en los que se utilizan las bases de Terapia Cognitivo Conductual, pueden ser utilizados con personas de cualquier edad.
Además este tipo de psicoterapia está basada en parámetros exclusivamente científicos, por lo que los efectos de su aplicación, han sido validados a través de la cuantificación de un gran número de casos observados, y recogidos de forma empírica.
Otra de las características de este método es que la consecución de objetivos es observable y cuantificable, frente a otros tipos de tratamientos psicoterapéuticos en los que no se fijan metas específicas, y medibles para conseguir examinarlas de forma empírica, y reflejar su eficacia dentro del método científico.
Los enfermos que han sido tratados con Terapia Cognitivo Conductual han conseguido, en un mayor porcentaje, reducir significativamente sus síntomas y mal estar asociado; frente a los que han seguido, o no, otros tratamientos y han tomado fármacos exclusivamente.
A las ventajas ya expuestas hay que sumar que la mejoría de los pacientes tratados con Terapias Cognitivo Conductuales se produce de una forma más saludable, económica y eficaz, que con la utilización de medicamentos que pueden provocar efectos perjudiciales sobre otras partes del organismo, incluso adición.
A los importantes porcentajes de éxito en la mejoría de pacientes tratados con este tipo de psicoterapia, hay que añadir que los resultados se obtienen en plazos de tiempo más breves que cuando se aplican terapias que parten de otros modelos teóricos.
Esto es así porque aunque importa el pasado de la persona que está sufriendo un determinado trastorno psicológico o neurológico, se concentra la atención principalmente en el mal estar del momento presente; frente a otro tipo de intervenciones en las que se parte de otras etapas muy anteriores de la vida de la persona, ralentizando el diagnóstico y la aplicación de soluciones.